- Proceso de Paz
- Generación paz
Mucha agua ha corrido en el río del tiempo desde cuando el general Gustavo Rojas Pinilla amnistió a las guerrillas liberales de mediados del siglo XX. Desde entonces, se han implementado en Colombia varios procesos de negociación cuyo desenlace ha oscilado entre el éxito moderado y el fracaso absoluto por motivos, en ocasiones, ajenos a la coyuntura nacional. ¿Qué ha cambiado desde aquella amnistía a los guerrilleros liberales que, una vez desmovilizados, fueron violentamente perseguidos y empujados (muchos de ellos) nuevamente a la lucha armada?
Gustavo Moncayo, reconocido líder de víctimas en Colombia quien sufrió en carne propia el dolor por actos llevados a cabo por las Farc, es uno de los abanderados de los diálogos de paz con esa guerrilla. Que no se paren de la Mesa hasta que lleguen a un acuerdo final, y que haya "unas normas, unos decretos, unas leyes que permitan que los tratados no tengan tropiezos... Uno de esos tropiezos puede ser la cárcel", le dice a GeneracionPaz.Co en entrevista realizada en la marcha del 9 de abril - Día de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas- en la ciudad de Bogotá.
Yaneth Camacho, hermana de José Eulises, guardaba silencio y apretaba el corazón. Por largo rato contuvo las lágrimas del dolor de tener en frente, en una caja diminuta, a su hermano de quien no sabía hacía casi una década. Al mismo tiempo, sentía alivio. Al fin apareció y pudo darle sepultura, despedirlo, y en adelante las noches no traerán la pregunta eterna: dónde está. “No pudimos compartir con él, conocer todo lo que tenía por dar, por compartir”, le dijo Yaneth a la prensa de las agencias del gobierno presentes en el acto.
El Bloque Efraín Guzmán fue el primero en comenzar la pedagogía del proceso de paz en sus campamentos. Con el apoyo del Comité Internacional de la Cruz Roja, integrantes del Secretariado y otros delegados de las Farc en La Habana volaron a encontrarse con sus hombres en las selvas y montañas. El propósito: contarles en qué van los acuerdos de la Mesa de Conversaciones, resolver dudas y dar instrucciones sobre lo que sigue en una futura dejación de armas y vuelta a la vida civil.
“La paz se construye en el territorio” es una frase que se ha vuelto común, y no es en vano, porque la futura implementación de los acuerdos logrados en La Habana no se puede dar solo en las capitales, ni desde el centralismo que ha caracterizado a Colombia. La tierra que precisa transformaciones inmediatas y donde se sembrará, abonará y se cosechará la paz está lejos de Bogotá. Para tal cultivo, será necesario que las autoridades locales comiencen desde ya a desyerbar, remover y fertilizar los territorios donde se plantará la semilla.
No quedaba agua en la despensa. El desabastecimiento de líquidos y alimentos fue, después del miedo, una de las consecuencias más leves del paro armado realizado por las Autodefensas Gaitanistas de Colombia (ACG) o Clan Úsuga la semana anterior. Con panfletos y audios amenazantes que circularon por redes sociales advirtieron que nadie podría salir a las calles, ni andar en moto, sacar sus carros o abrir sus negocios. Algunos perecieron en el intento por llegar a sus casas.