relatos

En el mar se entierran los rencores, expresaron las víctimas a orillas del Caribe. En Apartadó, en medio de cantos y versos, inauguraron la Casa de la Verdad, una de las primeras que abre sus puertas en el país como parte del despliegue territorial de la Comisión de la Verdad que inició labores en noviembre de 2018 e irá hasta noviembre de 2021. Esta institución es una de las tres que componen el Sistema Integral de Verdad, Justicia, Reparación y No Repetición (SIVJRNR) que se creó gracias al Acuerdo de Paz entre gobierno y Farc.  

 “El día que las Farc dijeron que entregarían las armas -relata Horacio- yo no creía. Me parecía mentira que eso fuera a ocurrir porque de tanta guerra que hemos visto uno desconfía de todo. Pero cuando vi que era cierto, no se lo niego, sentí que algo iba a cambiar”.

A sus 80 años, Horacio Ortiz Quiñónez no ha sabido cómo es vivir en paz y ahora quiere que las nuevas generaciones conozcan esa tranquilidad que le fue negada durante toda su vida, en La Plancha, vereda del municipio de Anorí, en el nordeste de Antioquia, donde viven 32 familias.

I
 

Cuando nos acercábamos al campamento, el Ejército –a lado y lado de la vía polvorienta– nos observaba a lo lejos. Pedro, el guerrillero que conducía la camioneta, no tuvo que esperar señales para detenerse. El motor ronroneaba mientras junto a su ventana apareció, en primer plano, el rostro del sargento que coordinaba unos seis muchachos armados que avistaban todo a orillas de este camino en las entrañas de La Guajira colombiana. Hacía calor.

–Buenas –se dijeron mutuamente mirándose a los ojos. Luego, estiraron el brazo y se apretaron la mano.

Esta 4 de mayo se retoman, una vez más, los cara a cara entre guerrilla y gobierno en La Habana, Cuba. La más reciente ronda de conversaciones culminó la semana pasada.

El presidente Juan Manuel Santos anunció en diciembre lo que se venía murmurando desde hacía tiempo, que “cualquier beneficio que se les diera a las Farc en materia de justicia, se les daría también a los miembros de nuestra Fuerza Pública”. Así lo el primer mandatario en una alocución televisada.

Benkos Biohó es el nombre de guerra de este hombre que se enlistó en las Farc desde temprana edad. Llegó a La Habana en el mes de noviembre del año pasado y por primera vez habló para la prensa colombiana. Aquí revela por qué decidió convertirse en guerrillero y qué piensa ahora que, en próximos días, estarían regresando al país a entregar las armas de realizarse la firma del acuerdo final en la Mesa de Conversaciones entre el gobierno colombiano y las Farc-Ep en Cuba.