En Medellín la Unión de Trabajadores de América (UNI) reafirmó su apoyo al proceso de paz y pidió su pronta implementación el marco de la Cuarta Conferencia entre el 7 y 9 de diciembre.
Impulsar una agenda laboral para la paz de modo que el sindicalismo en Colombia pueda ser reparado y protegido, es una de las principales apuestas de la Resolución “¡Vamos juntos, compañer@! Por la Paz y la Justicia Social en Colombia”, que adoptó la Conferencia de la UNI América. Durante la cuarta versión de la Conferencia desarrollada en Medellín, participaron más de un centenar de delegados de los sindicatos afiliados en toda la región. Todos definieron adoptar la Resolución que, según Sofía Espinosa, presidenta de UNEB Colombia, tiene también como fin solicitar garantías y libertades para la sindicalización en Colombia.
Esta Resolución de Urgencia se tomó determinando, entre otras, que UNI Américas ha conocido de primera mano los graves efectos y daños producidos por el conflicto armado en Colombia; la gran tragedia humanitaria que ha arrojado cerca de ocho millones de víctimas, la destrucción institucional y el gran desperdicio de energías y posibilidades para encontrar el desarrollo y la vida digna de los colombianos y colombianas. También que:
UNI Américas entiende que la posibilidad cierta de la paz en Colombia abre la oportunidad de la construcción de una auténtica democracia en los ámbitos, políticos, económicos y sociales, y en especial, un mejor lugar y papel de los trabajadores y trabajadoras y las organizaciones sindicales en la construcción de la sociedad.
Tras reconocer el compromiso de los dirigentes y activistas sindicales colombianos, así como su valentía para mantenerse en pie pese al exterminio sistemático del que son víctimas, la Cuarta Conferencia resolvió:
Mantener el apoyo al proceso de paz en Colombia, y en particular el apoyo al sindicalismo colombiano en sus acciones para garantizar la participación e incidencia en la implementación del acuerdo logrado con las FARC-EP y en el proceso de participación de la sociedad que se abrirá con el ELN.
También, UNI Américas se propuso promover la creación de una comisión sindical internacional que apoye y monitoree la implementación de la agenda laboral para la paz. E implementar una agenda laboral para la paz cque permita eliminar obstáculos y abrir espacios para que el sindicalismo en Colombia pueda reconstruirse, crecer, y ganar una mayor incidencia en el conjunto de la sociedad. Además, se trazó la meta de construir un plan de acción específico para Colombia dirigido a potenciar la creación, crecimiento de organizaciones sindicales en el sector servicios.
Para UNI Américas el apoyo al proceso de paz en Colombia ha resultado siempre de gran interés y sigue siendo una de sus prioridades. Para UNI “la desigualdad existente en Colombia (una de las más profundas desigualdades del mundo) es resultado de la exclusión a que se ha sometido al sindicalismo, y a la imposibilidad del diálogo social y la negociación colectiva”. Por ello UNI le seguirá apostando a construir planes para que las organizaciones sindicales en Colombia continúen su crecimiento y logren capacidades de diálogo social y negociación colectiva.
