La estrategia de miedo que despliegan los enemigos del Proceso de Paz alcanza ahora a los periodistas. En Cali, una periodista y un líder religioso están siendo víctimas de amenazas y seguimientos. Con coraje y convencimiento sobre el derecho a informar, María del Pilar habló con GeneracionPaz.Co
Es triste que cuando estamos viviendo la posibilidad de construir paz y es real la dejación de armas de un grupo armado, la intolerancia de algunos nos lleven a vivir una guerra de señalamientos y palabras que lo único que hacen es seguir sembrado temor en una sociedad que no sabe lo que es la paz.
Así expresa María del Pilar Aguilar, periodista en Cali, su rechazo ante las nuevas amenazas contra su vida y la del sacerdote Edilson Huérfano Ordónez. Ambos realizan un programa de televisión en el cual han venido abriendo los micrófonos a los diversos protagonistas de la paz, entre ellos guerrilleros que han pasado por su estudio.
Como ciudadana y periodista continuaré desde mi profesión y mi vida pensando que este país es posible pero lo más importante que es de todos. Como sociedad debemos entender que la paz la construimos desde la cotidianidad, como nuestras acciones y palabras.
María del Pilar ya había sido víctima de amenazas y seguimientos, por lo cual sus denuncias se encuentran en la Fiscalía hace un par de meses. Según dice, las autoridades determinaron que efectivamente estaba siendo amenazada. En internet la comunicadora compartió este mensaje:
Hoy nuevamente, junto al padre Edilson Huérfano, recibo un mensaje intimidante en el que se nos señala de guerrilleros y nos hacen una advertencia. De igual forma y como la otra vez, un vehículo, se acerca, esta vez, al canal donde tengo mi programa de tv, para de manera " disimulada" realizar fotografías del sitio, con la ventaja que llegué tarde y afortunadamente no me topé con ellos. Ya esta situación esta en manos de las autoridades. No había querido hacer pública esta situación, puesto que como periodista, estamos expuestos a todo tipo de comentarios y situaciones que a veces no pasa de eso. Sin embargo, debido a varias circunstancias que no comentaré aquí, prefiero hacerlo público y dejar claro que mi posición siempre será a favor de la paz, que no me callaré y que seguiré adelante con mi trabajo, con independencia, destacando lo que hay que destacar y cuestionando lo que hay que cuestionar.