Siguen matando los mejores

En medio de reconocidas ferias internacionales como Colombiamoda y Feria de Flores, Medellín no se escapa de su historia de violencias. Cinco personas fueron asesinadas este 27 de julio, entre ellos el rector de una institución educativa que causa conmoción en la comunidad local.

Por: 
Redacción Generación Paz

 

Manuel Jaime Arango no era una persona cualquiera. Era un ser humano excepcional. Dicen los que conocieron al rector del colegio Rafael Uribe Uribe, que ayer abalearon hasta asesinarlo en el barrio Aranjuez. Dice la institucionalidad que sería por robarle una moto en la que andaba. Dicen otros, con dolor y sentimiento, que "nada justifica el homicidio". 

 

En la calle 82 con carrera 50 C del barrio Campo Valdés, frente a la Institución Educativa San Juan Bosco, respiró su último aliente el profesor Manuel Jaime. Lo encontraron ya sin vida después de las cinco de la tarde, para sumarlo al listado de cinco hombres asesinados este 27 de julio en Medellín: la ciudad de la eterna primavera que no logra dejar atrás su herencia violenta y homicida. 

 

Dos cuerpos fueron hallados este mismo día en un taxi en el sector de Carlos E. Restrepo, causando alarma porque también una persona fue asesinada en medio del fuego cruzado ya sobreanunciado en Altavista que ni el Alcalde en visitas relámpago ni la Fuerza Pública han podido detener.

 

Por su parte, los habitentes de Robledo temen por sus vidas pues se rumora en las esquinas y en las redes sociales que los grupos ilegales que hacen presencia allí entrarán en disputa a plomo por el territorio.

 

Entre tanto, los promotores del Protocolo "Nada Justifica el Homicidio" de la campaña NO COPIO para desnaturalizar la muerte violenta y generar solidaridad ante la misma, insisten en la implementación del mismo en la Línea 123, y realizan "rituales vivos" para abrazar, literalmente, a las familias que están enterrando las más recientes víctimas de una absurda violencia que no cesa en esta urbe.

 

En medio de reconocidas ferias internacionales como Colombiamoda y Feria de Flores, Medellín no se escapa de su historia de pérdida de vidas valiosas a manos de gentes armadas cuyos crímenes quedan por lo regular en la impunidad.